VI VERI VENIVERSUM VIVUS VICI



lundi 29 décembre 2008

TEORIA DE LAS VENTANAS ROTAS

En 1969, en la Universidad de Stanford (EEUU), el Prof. Phillip Zimbardo realizó un experimento de psicología social. Dejó dos autos abandonados en la calle, dos autos idénticos, la misma marca, modelo y hasta color. Uno lo dejó en el Bronx, por entonces una zona pobre y conflictiva de Nueva York y el otro en Palo Alto, una zona rica y tranquila de California. Dos autos idénticos abandonados, dos barrios con poblaciones muy diferentes y un equipo de especialistas en psicología social estudiando las conductas de la gente en cada sitio.

Resultó que el auto abandonado en el Bronx comenzó a ser vandalizado en pocas horas. Perdió las llantas, el motor, los espejos, el radio, etc. Todo lo aprovechable se lo llevaron, y lo que no lo destruyeron. En cambio el auto abandonado en Palo Alto se mantuvo intacto.

Es común atribuir a la pobreza las causas del delito. Atribución en la que coinciden las posiciones ideológicas más conservadoras, (de derecha y de izquierda). Sin embargo, el experimento en cuestión no finalizó ahí, cuando el auto abandonado en el Bronx ya estaba deshecho y el de Palo Alto llevaba una semana impecable, los investigadores rompieron un vidrio del automóvil de Palo Alto.

El resultado fue que se desató el mismo proceso que en el Bronx, y el robo, la violencia y el vandalismo redujeron el vehículo al mismo estado que el del barrio pobre.

¿Por qué el vidrio roto en el auto abandonado en un vecindario supuestamente seguro es capaz de disparar todo un proceso delictivo?

No se trata de pobreza. Evidentemente es algo que tiene que ver con la psicología humana y con las relaciones sociales. Un vidrio roto en un auto abandonado transmite una idea de deterioro, de desinterés, de despreocupación que va rompiendo códigos de convivencia, como de ausencia de ley, de normas, de reglas, como que vale todo. Cada nuevo ataque que sufre el auto reafirma y multiplica esa idea, hasta que la escalada de actos cada vez peores se vuelve incontenible, desembocando en una violencia irracional.

En experimentos posteriores (James Q. Wilson y George Kelling) desarrollaron la 'teoría de las ventanas rotas', misma que desde un punto de vista criminológico concluye que el delito es mayor en las zonas donde el descuido, la suciedad, el desorden y el maltrato son mayores.

Si se rompe un vidrio de una ventana de un edificio y nadie lo repara, pronto estarán rotos todos los demás. Si una comunidad exhibe signos de deterioro y esto parece no importarle a nadie, entonces allí se generará el delito. Si se cometen 'pequeñas faltas' (estacionarse en lugar prohibido, exceder el límite de velocidad o pasarse una luz roja) y las mismas no son sancionadas, entonces comenzarán faltas ma
yores y luego delitos cada vez más graves.

Si los parques y otros espacios públicos deteriorados son progresivamente abandonados por la mayoría de la gente (que deja de salir de sus casas por temor a las pandillas), esos mismos espacios abandonados por la gente son progresivamente ocupados por los delincuentes.

La teoría de las ventanas rotas fue aplicada por primera vez a mediados de la década de los 80 en el metro de Nueva York, el cual se había convertido en el punto más peligroso de la ciudad. Se comenzó por combatir las pequeñas transgresiones: graffitis deteriorando el lugar, suciedad de las estaciones, ebriedad entre el público, evasiones del pago del pasaje, pequeños robos y desórdenes. Los resultados fueron evidentes. Comenzando por lo pequeño se logró hacer del metro un lugar seguro.

Posteriormente, en 1994, Rudolph Giuliani, alcalde de Nueva York, basado en la teoría de las ventanas rotas y en la experiencia del metro, impulsó una política de 'tolerancia cero'.
La estrategia consistía en crear comunidades limpias y ordenadas, no permitiendo transgresiones a la ley y a las normas de convivencia urbana.

El resultado práctico fue un enorme abatimiento de todos los índices criminales de la ciudad de Nueva York.

La expresión 'tolerancia cero' suena a una especie de solución autoritaria y represiva, pero su concepto principal es más bien la prevención y promoción de condiciones sociales de seguridad.

Se trata de crear comunidades limpias, ordenadas, respetuosas de la ley y de los códigos básicos de la convivencia social humana.

samedi 27 décembre 2008

Estructura la Masoneria

QQ:.HH:. y estimados lectores


Este diagrama llamado "Estructura de la Masonería" en realidad representa la estructura de los Grados en los Ritos de York Americano y Escoces. Es importante señalar que el Rito de York originalmente solo comprende 7 grados, los cuales siguen siendo practicados ademas de la version "Americana".

Aprovecho este Post para recordar que la Masonería tiene 3 Grados "Universales" dado que todos los ritos los presentan en sus estructuras. Estos 3 grados son llamados "Simbólicos" y son encontrados o practicados en lo que llamamos Logias "Azules" o "Simbólicas". Estos Grados son reconocidos por todas las Obediencias. El Mason que alcance el Sublime Grado de Maestro Mason puede continuar su perfeccionamiento por diferentes "caminos" que son los Ritos.

Lo importante de este diagrama es que muestra claramente que sea cual sea el camino tomado en la Masonería todo converge a un solo punto: el G:.A:.D:.U:. .

Es realmente lamentable que algunos credos consideren a la Orden Masonica como incompatible u opuesta a ellos. En repetidas ocaciones me han peguntado si un Mason podia profesar alguna religion, a lo cual siempre he respondido positivamente. Probablemente sea el hecho que la Masoneria es adogmatica lo que puede ser considerado como "negativo" por muchas religiones ... pero eso es tema para otro Post de este Blog. ¿Y tu H o estimado lector, que opinion tienes?

(click on image)

vendredi 26 décembre 2008

MASTER

They are sons of the light,
And dream in black and white
Of the azure ; they were born Brothers
In humanity. And nevertheless,
Some work on the wear
Their fellow men, really kill the time ;
Their pursuit of the sure values
Ends in funerals.


Around them everything collapses ;
They follow the bad companions ;
If they refuse that they guess
The angels change in devils.


They give in to the cowardly robberies,
To the appeal of the vanity,
To the temptation murder,
Change their tools in choppers.


Others are thirsty of justice,
And put back without growing tired,
On their place in the building,
Their work on the loom.


They are looking for the best of ours,
Over the abyss and the night ;
The spirit connects them one to another ;
Everything collects them, unites them.


They stay sick at heart,
Near the man with one’s righteous fight,
On Master Hiram’s grave,
Where already grows the acacia.


They go to someone’s assistance ; the loved Being
Of the centres of life, consciousness,
Is reborn more radiant than ever,
Makes above all the silence.


They sound the space, fill up
Answers which predestine them
To go hand in hand
The way of the divine life.


They change words, language ;
The breath of the wind takes them
Where the words of the wise men
Never become dead letters.


The compass holds our future
Between its points tightened,
What we did not know how to discover,
What we chose to ignore.


The slightest of the specks of dust
Which passes by in the hourglass
Goes farther, in the cave of the mysteries,
Than the plumb line of the thoughts.


The nave of stony vessels
Found its identity,
From its first measure,
At the level of a carried shade.


The stick crosses the sword in the set square
In a point for which intends itself
The full vision by flashes of lighting
Which guides us, determines us.


The gemstone included in the earth,
Became the cut stone,
With extraordinary polished,
Remains an unfinished work.

Why do Christmas trees survive?

The secret to the success of conifers—which include the planet's tallest and oldest trees--lies on their highly efficient valves that let water flow through simple conduits as easily as in the more complex angiosperm conduit system, researchers report in this week's Science.


In conifers, water flows upward through short, single-celled tracheids. In angiosperms, in contrast, the pipes consist of longer, multicellular conduits called vessels. Both systems have connecting pits—or valves—concentrated at the end-walls of the conduits. In conifers, water has to cross many more valves, suggesting that they may have higher flow resistance than angiosperms. However, the researchers found exactly the opposite. They showed that conifers apparently compensate for their structural handicaps because they have evolved pits that have much lower resistance than the average angiosperm—59 times lower, in fact.

"When you compare a conifer tracheid with an angiosperm vessel," explained study author John S. Sperry of the University of Utah, "when you put them head to head and compare the hydraulic resistivity for the same diameter, tracheids essentially have the same flow resistance as vessels, despite the fact that they are 10 times shorter, because the flow resistance through these fancy pits is so incredibly low."

Valves in conifers and angiosperms function in a slightly different way. The angiosperm valve is a simpler, evolutionarily older type of valve, which they retained from their ancestors. It has a cellulose pit membrane-- a thin mesh with very small pores—which functions by capillarity. "The pores in these valves are so small that the capillary forces set up as the air is drawn into the membranes are big enough that they keep the air from passing through," Sperry noted.

The conifer pit, in contrast, is a more recent acquisition. It also has a cellulose membrane, which has two distinct regions: a central torus, which is impermeable to water with very small pores, and a surrounding, very porous margo, which forms a loose web that holds to the torus. "In conifers, capillarity is not responsible for the ultimate sealing of the pit. The whole pit aspirates the torus, which blocks up the aperture," Sperry told The Scientist. "This explains why you can have such large pores in the margo."

Although the structural differences between the pits of angiosperms and conifers have been known for a long time, nobody had ever compared their hydraulic properties, until Jarmila Pittermann, at Sperry's lab, decided to take a look at the problem. When they studied the hydraulic resistance in the two major types of pits, the researchers found that the flow resistance in the conifer pit was, on average, 59 times lower per give area than in the angiosperm pit. "The torus-margo structure provides a huge advantage in terms of minimizing the flow resistance through these valves, and it does so without sacrificing safety from air entry" and the damaging phase-change from liquid to vapor, Sperry explained.

"For many years, I had taken for granted that the fairly porous torus-margo of conifers did for the conifers what the perforations did for angiosperms, but that was all speculative, it was never really experimentally proven," Pieter Baas, from the Nationaal Herbarium Nederland, at the Universiteit Leiden Branch in The Netherlands, told The Scientist.

N. Michele Holbrook of Harvard University found the work "beautiful." Sperry and his team "really demonstrated how these are two different solutions to a same basic problem," Holbrook added.

According to Sperry, the modern torus-margo type of pit membrane is a trade off, which allows conifers to compensate for the high-frequency of inwalls in their tracheid-based xylem. "Conifers have achieved similar, if not lower, hydraulic resistivity than angiosperms, and this is, in part, why conifers can compete so effectively with angiosperms despite the fact that their xylem is so much simpler," Sperry concluded.

© 1986-2008 The Scientist

Were King Solomon’s Pillars Hexagonal?

written by Alan Bergin

imageBrethren, we are all aware of the two great pillars at the entrance or porch to King Solomon’s Temple. We have to use our imagination as to what they looked like, because no photographs or pictures exist. Their dimensions are found in the Bible in 1 Kings 7 and 2 Chronicles 3. There are discrepancies from these sources as to the pillars’ height dimensions, either 18 or 35 cubits, but 1 Kings 15 does tell us, “a line of twelve cubits did compass either of them about.” However, the third section of the Second Degree Lecture as demonstrated in the Emulation Lodge of Improvement explains their circumference is twelve and their diameter four.

“How is this possible?” the question must be asked. Anyone who has studied some form of mathematics realize that these dimensions are impossible. The Greek letter pi (π = 3.142 approximately) is used to denote the ratio between diameters and circumferences. So how can we find a solution to this problem?

We have this anomaly, possibly because we all assume that the pillars were circular. We perambulate round the lodge, but we square it! If we say we are “walking round to the shop,” or “going round the house” are we going in a circle? No, we are merely describing a path that starts and ends at the same point. So what if the two pillars were not circular? Now that makes you think!

So what shape could they be? You can’t have a square, as a diameter of 4 would produce a circumference of 16, nor does a triangle compute. What other information can we use to help us solve this problem? The chapiters on the pillars were adorned with pomegranates and lilies. What significance does this have to the pillar’s dimensions you may ask? All lilies have six petals, that is, six sides. What shape do we know that has six sides? The answer is a hexagon.

imageA hexagon fits all of the above criteria. It can have a diameter of 4 with a circumference of 12. If each face or side of the hexagon has a length of 2, this gives a circumference of 12. Also mathematics proves that this diameter is 4 from point to point. A hexagon also starts and ends in the same point and hence is “circular.”

We must remember that these pillars were made. It would certainly have been a lot easier to manufacture a hexagonal mould and to make a casting of molten brass thereof, than to have made a circular one. This is by no means a way of saying that the pillars were hexagonal, but it is certainly a possibility.

Never forget that the pillars are symbols, and a sign of brotherly love—whatever shape they may have been.

The Scottish Rite Journal (ISSN 1076-8572)

dimanche 21 décembre 2008

ENCUESTA, SONDAGE

Estimados Visitantes y lectores:

Como parte del interés que tenemos por conocer mejor la opinión general que tiene el mundo sobre la Masonería, se les invita de la manera mas atenta a participar a nuestra encuesta, la cual se encuentra sobre la columna de la derecha, justo abajo de nuestro escudo.

De antemano les agradezco su participación.

Para meditar ...


Los hombres suelen exagerar el valor de lo que no poseen. Los pobres creen que no necesitan más que dinero para ser perfectamente dichosos. Todos reverencian la verdad, la pureza y la abnegación porque no poseen estas virtudes. ¡Si tan solo las conocieran!

(G. B. Shaw)

samedi 20 décembre 2008

El nombre de Jehová y el Templo de Salomón

Según la leyenda, cuando Salomón comenzó la edificación del Templo halló la medida con la que debía construirlo, y se dice que colocando el nombre de Jehová en la boca o abertura del hoyo que se hizo al principiar los cimientos; y también se menciona, que colocando este nombre en el “agujero del tapón de un tonel”. Esto lo sostiene la tradición Cabalística, cuya referencia podemos hallarla en el Succoth, que así lo destaca.
Hoy sabemos que la abertura redonda y el agujero del tapón eran el círculo. Porque era costumbre de los israelitas convertir las medidas circulares y esféricas en sus equivalencias, en medidas cuadradas y cúbicas. Y tal como lo sostienen analistas del tema, “cosa que demostrará que éste, o uno de los valores del nombre Jehová, era el del diámetro del círculo; el cual significa especialmente la unidad de medida de la línea recta, o de la superficie cuadrada, o también del cubo sólido, que tienen un valor puramente circular”.

Tal es la definición de la idea arquitectónica de construcción, que suponemos establecida por la tradición, y trasmitida en tal forma en el Succoth.

ARMAGEDON

Según un artículo publicado en el The New York Times por John Noble Wilford, el choque entre el bien y el mal que el autor del “Libro de la Revelación” supuso al parecer para el año 2000, se ubicaría en un lugar al norte de Israel denominado Megiddó.Hoy los arqueólogos no tienen duda que un monte de 10 hectáreas, casi 30 kilómetros al sudeste de Haifa, es el sitio de Megiddó, antigua ciudad que se menciona en 8 oportunidades en la Biblia. El término Armagedón, que aparece en el Apocalipsis (16:16) es interpretado por muchos estudiosos como una deformación de los términos hebreos Har Maggido, cuyo significado es “el cerro o morro de Magiddó”.

Ese lugar soportó durante 4000 años duras batallas. Excavaciones realizadas allí, parece que producirán un verdadero Armagedón, pero por cuestionar algunas certezas bíblicas en especial, relativas a la historia de la realeza israelita y poniendo en entredicho a David y Salomón.
No obstante, lo que nos interesa es que Magiddó debe el sitiol a su relación con el Día del Juicio final y en especial por su estratégica ubicación como enclave
en una de las más importantes rutas militares y comerciales del mundo antiguo: vinculaba a Egipto en el sur con Siria y la Mesopotamia hacia el Norte y el Este. En la Biblia y en textos Egipcios y Asirios, tanto Magiddó como el adyacente valle de Jezreel, se citan como ámbito de sangrientas batallas en las que participaron faraones y reyes cananeos, filisteos
e israelitas.
Una interesante opinión al respecto, está dada por
el autor de The Battles of Armagedón, Eric C. Cline,
arqueólogo de la Cincinnati University, quien dijo "No
asombra que el autor del Apocalipsis llegara a la
concluisión de que la batalla final entre el Bien y el
Mal tendría lugar allí", porque en una de las ultimas y
más fatídicas batallas realizadas en Megiddó en
tiempos bíblicos, se enfrentaron Josías, rey de Judá
y último descendiente real de la casa de David, y el
faraón Necao II, en el 609 a.C. La derrota y muerte
de Josías preparó el camino para el exilio de los judíos
en Babilonia, iniciado en el 586 a.C.
"Esta derrota -agregó Cline- plantea también un tema
interesante: como el último miembro de la casa de
David murió en una batalla en Megiddó, tal vez sea
allí donde el siguiente miembro aparecerá en su
segunda venida", refiriéndose a Jesús, que se decía
era descendiente del rey David.

Las Tres Columnas

La columna es un pilar redondo que se usa para sostener así como para adornar un edificio, cuya construcción varía en las diferentes órdenes de arquitectura. En la Masonería, las columnas tienen una significación simbólica, de sostenes de la Logia, y se conocen como Columnas de la Sabiduría, la Fuerza, y la Belleza. La columna rota, es también un símbolo en nuestra Orden.

Entre los Hebreos, las columnas o pilares, se utilizaban metafóricamente para significar los príncipes o nobles, como si fuesen las columnas del Estado. Así en el Salmo XI, 3, el pasaje,
leído en nuestra traducción, dice: “Si los cimientos son destruidos, ¿qué pueden hacer los justos?" Es en el original, "cuando las columnas sean demolidas", es decir, "cuando los sustentáculos firmes de lo que es justo y bueno hayan perecido".

Lo mismo en el pasaje de Isaías xix, 10 debería decir: “sus (De Egipto) columnas están derribadas,” es decir, los nobles de su Estado. En la Francmasonería, la columna rota es, como lo
saben bien los Maestros Masones, el emblema de la caída de uno de los principales sostenes del Gremio. El uso de la columna o pilar como un monumento erigido sobre una tumba era
una costumbre muy antigua, y era un símbolo muy significativo del carácter y espíritu de la persona sepultada.


Ref. Revista "Hiram Abif" N°1 Vol.1